El espíritu solidario continúa brillando en nuestra comunidad escolar, y el pasado 12 de octubre, realizamos una segunda visita al Hogar de Ancianos San Alberto Hurtado. En esta ocasión, los alumnos de primero y segundo medio se unieron a esta hermosa causa, demostrando su compromiso con la comunidad y su respeto por nuestros mayores.
Nuevamente, la jornada fue una experiencia enriquecedora para todos los involucrados. Los jóvenes mostraron su generosidad y dedicación al compartir su tiempo y cariño con los residentes del hogar. Prepararon números artísticos que llenaron de alegría y emoción el ambiente, mostrando su talento y creatividad. Las risas y el entretenimiento llenaron las salas, creando momentos especiales y cálidos recuerdos para los ancianos.
Pero más allá de la diversión, lo más valioso de esta actividad fue la oportunidad de escuchar y aprender de nuestros mayores. Conversar con ellos, escuchar sus historias de vida y experiencias es un regalo invaluable para nuestros jóvenes, quienes continúan aprendiendo lecciones de vida que solo los ancianos pueden transmitir.
Al igual que en la primera visita, los alumnos compartieron colaciones con los residentes, fortaleciendo los lazos entre generaciones y creando un ambiente acogedor que todos disfrutaron.
En nombre de la comunidad, queremos expresar nuestro profundo agradecimiento a estos jóvenes solidarios que, una vez más, han demostrado que la empatía y la acción pueden marcar la diferencia en la vida de los demás. Su compromiso con el bienestar de los ancianos es un ejemplo inspirador para todos nosotros y un recordatorio de que juntos podemos construir un mundo más compasivo y solidario. Gracias a los alumnos de primero y segundo medio por su amor y dedicación a esta noble causa.
Segunda visita hogar – Acción Solidaria CSPNQ
El espíritu solidario continúa brillando en nuestra comunidad escolar, y el pasado 12 de octubre, realizamos una segunda visita al Hogar de Ancianos San Alberto Hurtado. En esta ocasión, los alumnos de primero y segundo medio se unieron a esta hermosa causa, demostrando su compromiso con la comunidad y su respeto por nuestros mayores.
Nuevamente, la jornada fue una experiencia enriquecedora para todos los involucrados. Los jóvenes mostraron su generosidad y dedicación al compartir su tiempo y cariño con los residentes del hogar. Prepararon números artísticos que llenaron de alegría y emoción el ambiente, mostrando su talento y creatividad. Las risas y el entretenimiento llenaron las salas, creando momentos especiales y cálidos recuerdos para los ancianos.
Pero más allá de la diversión, lo más valioso de esta actividad fue la oportunidad de escuchar y aprender de nuestros mayores. Conversar con ellos, escuchar sus historias de vida y experiencias es un regalo invaluable para nuestros jóvenes, quienes continúan aprendiendo lecciones de vida que solo los ancianos pueden transmitir.
Al igual que en la primera visita, los alumnos compartieron colaciones con los residentes, fortaleciendo los lazos entre generaciones y creando un ambiente acogedor que todos disfrutaron.
En nombre de la comunidad, queremos expresar nuestro profundo agradecimiento a estos jóvenes solidarios que, una vez más, han demostrado que la empatía y la acción pueden marcar la diferencia en la vida de los demás. Su compromiso con el bienestar de los ancianos es un ejemplo inspirador para todos nosotros y un recordatorio de que juntos podemos construir un mundo más compasivo y solidario. Gracias a los alumnos de primero y segundo medio por su amor y dedicación a esta noble causa.
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